El gato, el animal que fue llamado dios (II)
Diosa en Egipto y guardiĆ”n del tiempo en China… el gato tambiĆ©n es parte de la mitologĆa de JapĆ³n y de las frĆas tierras vikingas del norte de Europa.
los gatos youkai japoneses
La investigaciĆ³n genĆ©tica indica que los primeros gatos llegaron a JapĆ³n en el 552 A.C desde la India, a travĆ©s desde China. El primer registro escrito de un gato se encuentra en los registros del emperador
Para la mitologĆa japonesa, el gato pertenece a los youkai, criaturas de naturaleza sobrenatural que a su vez podĆa ser un monstruo, un espĆritu o un demonio. Precisa Hablemosdemitologias.com el porquĆ©:
Los gatos son seres vivos que poseen caracterĆsticas muy particulares, son sigilosos, no producen sonidos al andar; su pelaje es sensible a la estĆ”tica y cuando se enfurecen o se colocan en modo alerta, se erizan; sus ojos, pueden cambiar fĆ”cilmente de color dependiendo de la cantidad de luz.
Existen dos tipos de gatos youkai segĆŗn JapĆ³n: el bakeneko y el nekomata. La diferencia mĆ”s importante entre ambos es el nĆŗmero de colas: el nekomata tiene dos colas y el bakeneko una sola.
Bakeneko por el pintor ukiyo-e Utagawa Kuniyoshi (1798-1861) Con licencia Creative Commons.
SegĆŗn el folklore, los bakeneko tenĆan propiedades mĆ”gicas como transformarse en seres humanos (particularmente personas ancianas) y cumplir sus propĆ³sitos. PodĆan conjurar y manejar el fuego y tanto ellos como los nekomata podĆan manipular a los espĆritus de los fallecidos.
En caso de ambos youkai, nos cuenta Hyakumonogatari Kaidankai, se sabe que las leyendas empezaron con pescado.
La mayorĆa de JapĆ³n en aquel tiempo tenĆa una dieta basada en vegetales y grano, y cuando estaban hambrientos conseguĆan proteĆnas de donde podĆan. Y muchos hogares tenĆan un buen suministro, aunque sin saberlo.
Las lĆ”mparas de aceite de aquella Ć©poca usaban aceite de pescado como combustible. Para un gato falto de proteĆnas era exactamente lo que necesitaba, y llegarĆa a ponerse a dos patas para alcanzar la lĆ”mpara y lamer el aceite de pescado. Los asustados dueƱos verĆan las sombras producidas por la lĆ”mpara, y observarĆan cĆ³mo su pequeƱo gatito de pronto se alargaba y se alzaba sobre sus patas traseras, como si se transformara en humano. AsĆ se estableciĆ³ la conexiĆ³n entre los bakeneko y las sombras.
Los bakeneko, ademĆ”s, son famosos en la tradiciĆ³n oral y en otras artes, como el teatro kabuki. La leyenda mĆ”s famosa es la RebeliĆ³n Bakeneko de Nabeshima.
Relata Hyakumonogatari Kaidankai:
Esta historia transcurre en la provincia de Hizen (actualmente prefectura de Saga) durante el mandato de Nabeshima Mitsushige (1632-1700). Nabeshima contratĆ³ a un hombre llamado Ryuzoji Matashichi para que le sirviera como oponente al Go. Un dĆa Matashichi perdiĆ³ el favor de su seƱor Nabeshima, y Nabeshima mandĆ³ ejecutarlo. La madre de Matashichi se sintiĆ³ descorazonada, llorĆ³ y compartiĆ³ su tristeza con el gato de la familia, y despuĆ©s se matĆ³ con un cuchillo.
El gato lamiĆ³ la sangre de la madre, y a causa de ello se transformĆ³ en bakeneko. Todas las noches el gato se colaba en el castillo para atormentar a Nabeshima. La maldiciĆ³n terminĆ³ cuando el fiel hombre de confianza de Nabeshima, Komori Hanzaemon luchĆ³ contra el gato y venciĆ³, salvando la casa de Nabeshima.
La historia es famosa no sĆ³lo como leyenda, sino porque coincide con un conflicto de sucesiĆ³n real en la casa Nabeshima. Se convirtiĆ³ en una obra de teatro kabuki que debutĆ³ en el teatro Nakamura-za en la dĆ©cada de 1840, titulada “Hana Sagano Nekoma Ishibumi Shi” ( č±åµÆå³Øéē«éē¢å²; La Historia del Monumento de Piedra del Gato DemonĆaco de Sagano). La obra fue un Ć©xito, pero la familia Nabeshima pidiĆ³ con Ć©xito que se cerrara la producciĆ³n. Fue demasiado tarde, sin embargo. El gato ya se habĆa escapado del saco, y el bakeneko se convirtiĆ³ en un monstruo popular en futuras obras de kabuki.
Gatos en el norte
Gatos y perros fueron animales y para los vikingos (790 - 1100 DC) de los paĆses que hoy conforman Escandinavia (Noruega, Suecia, Finlandia, Groenlandia, Dinamarca e Islandia), asĆ como compaƱeros en sus exploraciones. TambiĆ©n fueron parte de su cultura y mitologĆa: el felino fue el animal sagrado de la diosa del amor y la buena fortuna, Freyja.
RepresentaciĆ³n de Freyja y sus gatos sagrados en el Poetic Edda (1893). Imagen con licencia Creative Commons
Se decĆa que el buen clima de una boda obedecĆa al buen trato que se diera al gato de la familia. La carroza de Freyja era tirada por dos gatos de raza Bosque de Noruega, mensajeros ante la diosa de aquellos devotos que buscaran sus favores.
Se cree que llegaron por primera vez a las regiones nĆ³rdicas gracias a los intercambios entre los escandinavos y otras culturas.
"FEELINGS"
Gato noruego del bosque. Imagen con licencia Creative Commons
Por EstefanĆa Salazar
La investigaciĆ³n genĆ©tica indica que los primeros gatos llegaron a JapĆ³n en el 552 A.C desde la India, a travĆ©s desde China. El primer registro escrito de un gato se encuentra en los registros del emperador
Para la mitologĆa japonesa, el gato pertenece a los youkai, criaturas de naturaleza sobrenatural que a su vez podĆa ser un monstruo, un espĆritu o un demonio. Precisa Hablemosdemitologias.com el porquĆ©:
Los gatos son seres vivos que poseen caracterĆsticas muy particulares, son sigilosos, no producen sonidos al andar; su pelaje es sensible a la estĆ”tica y cuando se enfurecen o se colocan en modo alerta, se erizan; sus ojos, pueden cambiar fĆ”cilmente de color dependiendo de la cantidad de luz.
Existen dos tipos de gatos youkai segĆŗn JapĆ³n: el bakeneko y el nekomata. La diferencia mĆ”s importante entre ambos es el nĆŗmero de colas: el nekomata tiene dos colas y el bakeneko una sola.
Bakeneko por el pintor ukiyo-e Utagawa Kuniyoshi (1798-1861) Con licencia Creative Commons.
SegĆŗn el folklore, los bakeneko tenĆan propiedades mĆ”gicas como transformarse en seres humanos (particularmente personas ancianas) y cumplir sus propĆ³sitos. PodĆan conjurar y manejar el fuego y tanto ellos como los nekomata podĆan manipular a los espĆritus de los fallecidos.
En caso de ambos youkai, nos cuenta Hyakumonogatari Kaidankai, se sabe que las leyendas empezaron con pescado.
La mayorĆa de JapĆ³n en aquel tiempo tenĆa una dieta basada en vegetales y grano, y cuando estaban hambrientos conseguĆan proteĆnas de donde podĆan. Y muchos hogares tenĆan un buen suministro, aunque sin saberlo.
Las lĆ”mparas de aceite de aquella Ć©poca usaban aceite de pescado como combustible. Para un gato falto de proteĆnas era exactamente lo que necesitaba, y llegarĆa a ponerse a dos patas para alcanzar la lĆ”mpara y lamer el aceite de pescado. Los asustados dueƱos verĆan las sombras producidas por la lĆ”mpara, y observarĆan cĆ³mo su pequeƱo gatito de pronto se alargaba y se alzaba sobre sus patas traseras, como si se transformara en humano. AsĆ se estableciĆ³ la conexiĆ³n entre los bakeneko y las sombras.
Los bakeneko, ademĆ”s, son famosos en la tradiciĆ³n oral y en otras artes, como el teatro kabuki. La leyenda mĆ”s famosa es la RebeliĆ³n Bakeneko de Nabeshima.
Relata Hyakumonogatari Kaidankai:
Esta historia transcurre en la provincia de Hizen (actualmente prefectura de Saga) durante el mandato de Nabeshima Mitsushige (1632-1700). Nabeshima contratĆ³ a un hombre llamado Ryuzoji Matashichi para que le sirviera como oponente al Go. Un dĆa Matashichi perdiĆ³ el favor de su seƱor Nabeshima, y Nabeshima mandĆ³ ejecutarlo. La madre de Matashichi se sintiĆ³ descorazonada, llorĆ³ y compartiĆ³ su tristeza con el gato de la familia, y despuĆ©s se matĆ³ con un cuchillo.
El gato lamiĆ³ la sangre de la madre, y a causa de ello se transformĆ³ en bakeneko. Todas las noches el gato se colaba en el castillo para atormentar a Nabeshima. La maldiciĆ³n terminĆ³ cuando el fiel hombre de confianza de Nabeshima, Komori Hanzaemon luchĆ³ contra el gato y venciĆ³, salvando la casa de Nabeshima.
La historia es famosa no sĆ³lo como leyenda, sino porque coincide con un conflicto de sucesiĆ³n real en la casa Nabeshima. Se convirtiĆ³ en una obra de teatro kabuki que debutĆ³ en el teatro Nakamura-za en la dĆ©cada de 1840, titulada “Hana Sagano Nekoma Ishibumi Shi” ( č±åµÆå³Øéē«éē¢å²; La Historia del Monumento de Piedra del Gato DemonĆaco de Sagano). La obra fue un Ć©xito, pero la familia Nabeshima pidiĆ³ con Ć©xito que se cerrara la producciĆ³n. Fue demasiado tarde, sin embargo. El gato ya se habĆa escapado del saco, y el bakeneko se convirtiĆ³ en un monstruo popular en futuras obras de kabuki.
Gatos en el norte
Gatos y perros fueron animales y para los vikingos (790 - 1100 DC) de los paĆses que hoy conforman Escandinavia (Noruega, Suecia, Finlandia, Groenlandia, Dinamarca e Islandia), asĆ como compaƱeros en sus exploraciones. TambiĆ©n fueron parte de su cultura y mitologĆa: el felino fue el animal sagrado de la diosa del amor y la buena fortuna, Freyja.
RepresentaciĆ³n de Freyja y sus gatos sagrados en el Poetic Edda (1893). Imagen con licencia Creative Commons
Se decĆa que el buen clima de una boda obedecĆa al buen trato que se diera al gato de la familia. La carroza de Freyja era tirada por dos gatos de raza Bosque de Noruega, mensajeros ante la diosa de aquellos devotos que buscaran sus favores.
Se cree que llegaron por primera vez a las regiones nĆ³rdicas gracias a los intercambios entre los escandinavos y otras culturas.
"FEELINGS"
Gato noruego del bosque. Imagen con licencia Creative Commons
Por EstefanĆa Salazar
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