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No me vale.
No me vale que se haya matado a un animal torturándolo en agonía hasta su muerte lenta y cruel por asfixia y con signos de haber sido apuñalado, y que nadie se personara en acusación particular.
No me vale que la Concejala de Bienestar Animal de Tahiche , no se sepa los protocolos y no sabía ni donde meter al animal muerto y que hacer con el.
No me vale que no le quitarán ni la bridas cuando lo llevaron a hacer la necropsia, no me vale que digas que murió por asfixia y no señales las otras lesiones que su cuerpo presentaba.
No me vale que digas que lo dejaste en manos del Seprona y la Policía y te quedaste mas ancha que Pancha.
No me vale que no dijeras nada a nadie, a Protectoras, a gente que quería al animal querido por todo el pueblo, no me vale, porque callaste a tu conveniencia.
No me vale que digas que le van a poner una plaquita para recordar lo que se hizo, eso no me vale de nada.
No me vale ese juicio rápido inusual pero legal y ese fiscal que solo propuso la pena mínima y se acepto por ambas partes.
No me vale una pena mínima que se queda en nada por un asesinato con maldad y alevosía, y que la sentencia sea firme sin derecho a revocarla.
No me vale que dos personas ataran, torturaran, encintaran el hocico con brida y cinta aislante y luego lo grabaran hasta su muerte.
No me vale la excusa cobarde de unos de los implicados en el crimen diciendo que fue un error, un lamentable error, y que digas que lo grabo para enseñárselo al ayuntamiento y a una persona del ámbito político, eso me suena a hago lo que quiero porque tengo amistades y poderoso caballero es don dinero, y el dinero con el poder hacen un cóctel muy malo.
No me vale que se puso nerviosa y siguió grabando y viendo como el perro se moría y no hizo nada, solo grabarlo y cuando falleció decir que un trabajo menos, porque las perreras están saturadas.
No me vale nada de lo que hicisteis con Timple por seguridad de vosotros, eso en ensañamiento de un crimen cuajado a fuego lento.
No me valen las leyes que están caducas y obsoletas y que los jueces y fiscales hagan la vista gorda para los más indefensos y débiles, en este caso los animales.
No me vale el hacer lo que quiero porque estoy protegida por Don dinero y sus allegados a el.
No me vale que en toda España no este reconocido el animal como ser sintiente, teniendo sentimientos y sistema nervioso.
No me vale que el Seprona no hiciera nada, solo personarse después del homicidio y punto pelota.
No me vale que cada vez que se intenta, o intento escribir para defender a los animales no haya lugar en muchos sitios, porque eso no es política, porque eso no es corrupción y por lo tanto no merece la pena publicarlo.
No me vale que sigamos con perros en azoteas, atados, solos en fincas, en zulos por los cazadores, a veces sin el pan y el agua que le dan por alimento, pasando frío y calor, ojos que no ven, corazón que no siente, no me vale que sepa que se tratan como objetos y propiedad para hacer con ellos lo que quieran porque se consideran dueños de ellos.
No me vale que los mismos ayuntamientos y cabildos tengan en vigor la ordenanza de muerte por inyección letal con los animales cuando según ellos estan saturados, o les tienen enquina, o hago lo que quiero porque si, y nadie me dice nada, lo que molesta se quita con la inyección letal, habiendo otras alternativas, pero que no los hacen porque es mejor guardarse el dinero en el bolsillo que emplearlos en su bienestar.
No me vale que seamos los particulares los que sacamos del fuego el problema de los animales en la isla, dándoles de comer y beber y curando sus heridas y enfermedades, eso no me vale, los animales son responsabilidad de Ayuntamientos y Cabildos, todos, no solo las pardelas.
No me vale nada todo lo que ha acontecido con el asesinato cruel con el perrito Timple en Lanzarote, porque eso es lo que ha sido, ellos mismos lo grabaron, no hay excusa, y en el pecado esta la penitencia.
Por eso lucho por los animales, ellos no tienen voz, yo si, y nadie me va a callar, hasta que llegue la hora de la mi muerte.
Amelia Arcos.
Carrizal a 9 de agosto de 2020